despójate del miedo
y trae tu cabello suelto,
que iremos donde la cascada que saluda
y esperaremos la neblina mañanera
montados en el cerro.
entonces dirás que estamos en el cielo.
Cuando Vengas a Támesis,
trae tu sonrisa,
que aquí los niños siguen siendo alegres.
Cuando vengas a Támesis,
olvida tus peores tiempos,
que desde mi balcón miraremos el paisaje
y al ver los arreboles
te sentirás eterna.
Cuando vengas a Támesis
trae tus mejores ojos,
que cruzarás de mi brazo el San Antonio,
el Cartama, el rio frio,
y al conjugar el verde, el azul, el cristalino
me dirás al oído...
,,, estoy conociendo la pureza.
Cuando vengas a Támesis,
ordena bien tus sentimientos,
que iremos a descifrar petroglifos
y podrás leer en una roca
las iniciales de tu nombre
y un "te amo".
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